Ya el 70% de la dieta del caballo debe de ser forraje, y tener esta parte cubierta le proporciona mucha tranquilidad.
Pero ¿qué ocurre si nuestro caballo no puede tomar ese heno porque tiene alergia a su polvo? ¿Como llenamos ese 70% de la dieta?
En el Blog de Pavo hablaremos del asma y del manejo de cuadra que es necesario para mejorar la salud de los caballos esos que sufren insuficiencia respiratoria por alergia al polvo, más bien, a lo que lleva el polvo.
Síntomas del asma en el caballo
El principal síntoma de esta enfermedad es una tos crónica seca.
El moco que solemos ver de forma habitual en los ollares, fluido y transparente, aparece en mayor cantidad. Tras la tos puede, ocasionalmente, expulsar moco, esta vez con color y denso.
Ollares dilatados para aumentar la entrada de aire. Nos da la sensación de que el caballo ha estado haciendo ejercicio, cuando y la realidad está parado en el box o en el campo.
Else dilatados en reposo que reflejan dificultad respiratoria
Esta misma sensación, la tenemos cuando observamos el abdomen, que intenta compensar esa falta de aire empujando el diafragma para llenar de aire los pulmones, creando lo que se llama una respiración abdominal.
No es necesario diagnosticar el asma, pero también es necesario hacerlo por las razones subyacentes:
Los síntomas en los procesos de asma leves o en su inicio pueden pasar desapercibidos, ya que incluso pueden cursar simplemente con una reducción del rendimiento por esa pequeña dificultad respiratoria. En ocasiones, tienen toses, que son tan aisladas, que se atribuyen erróneamente a atragantamientos, ya que, como decíamos, el moco de la nariz sigue siendo fluido y transparente, y es difícil de detectar si ha aumentado o no.
Los síntomas en procesos graves de asma se pueden confundir con otros procesos respiratorios como las neumonías. Aquí hay gran dificultad respiratoria, tos intensa y mocos con color.
La fase más fácil de reconocer es la intermedia. Se trata de un caballo con dificultad respiratoria en diferentes grados y con tos seca (sin mocos) crónica.
El asma también se denomina EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica), huélfago, bronquitis obstructiva, enfisema, EPOC asociada a pastos de verano, y otras denominaciones según su origen, la intensidad del cuadro o las lesiones producidas.
En definitiva, es un caballo con dificultad respiratoria en diferentes grados y con tos seca crónica. También se denomina EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica)
Origen del asma o EPOC del caballo
La cama
Esta enfermedad suele aparecer en caballos que están mucho tiempo estabulados ya que tanto la cama como la poca ventilación hacen que la densidad de materia en suspensión sea mayor que en el campo. Cada vez que el animal se mueve, lo que ocurre es que remueve la cama y levanta polvo.
Pero ¿por qué otros animales en las mismas condiciones no la padecen? Esto es así ya que para sufrirla, el caballo debe estar hipersensibilizado, es decir, ser alérgico.
Debemos de tener en cuenta que hablamos de un animal con hipersensibilidad, en el que mínimas cantidades de polvo estimulan la enfermedad.
Un ejemplo nos ayudará a entender que, aunque la cama del caballo esté impecable, existen esas cantidades mínimas de polvo desencadenantes.
Sabemos que en aquellas personas alérgicas a las abejas, simplemente, con una picadura comienza el cuadro de alergia que, a su vez, puede desencadenar el choque anafiláctico e incluso la muerte. Una persona no alérgica, con una sola picadura solo desarrolla un cuadro de dolor e inflamación muy localizado.
Lo mismo sucede con nuestros caballos, un caballo alérgico al polvo, desarrollará el cuadro, por muy limpia de excrementos que tenga la cama si en ella está el alérgeno causante. Pero, por otro lado, una cama sucia supone altos niveles de amoniaco, lo cual irrita el respiratorio, agravando el cuadro de la alergia o produciendo alergia por si mismo.
El forraje
La alergia al polvo es un concepto muy general que engloba alergias a las esporas del Aspergillus fumigatus, un hongo que es habitual de henos y pajas almacenados en condiciones de humedad superiores al 20 o 30%.
Existen también algunas bacterias y ácaros, que crecen en estas mismas condiciones de humedad, que también inducen la alergia. Los ácaros del polvo se alimentan de esporas y las liberan en sus heces, de modo que el ácaro puede producir alergia por sí mismo y por sus heces.
El polvo del heno es la principal causa de asma
Partículas de plantas o pólenes
En este caso, se ven más afectados los caballos que están en el exterior, en contacto con ese polen o esa planta a la que son alérgicos, pero no lo podemos descartar en caballos que están en boxes, por la facilidad de expansión del polen o porque el caballo accede al exterior, aunque sea poco tiempo.
Tratamiento del asma en el caballo
Las alergias no tienen cura, pero se puede mejorar mucho la sintomatología reduciendo la exposición a los alérgenos y aplicando tratamiento médico en las crisis respiratorias o cuando el cuadro empeora, para aliviar al caballo y que pueda ventilar mejor.
Tratamiento médico
Los tratamientos medicamentosos pueden tener efectos secundarios importantes, por eso debes de reservarlos a estas crisis. Tu veterinario te prescribirá los más apropiados y sus dosis, teniendo en cuenta la gravedad de los síntomas de tu caballo.
Es muy frecuente que este tipo de tratamiento sea positivo al dopping y también deberá tenerse en cuenta.
Tratamiento preventivo
Por los efectos secundarios de los medicamentos y que estos pueden dar dopping, lo fundamental para tratar el asma es disminuir la presencia de los alérgenos, que no es tarea fácil, pero a la larga es lo más saludable.
Puntos a controlar:
Asegurarnos de que la humedad en el almacén sea baja.
Como vimos al principio del artículo, el origen es un grado de humedad alto durante la conservación del forraje, ya que aumenta la presencia de los alérgenos.
Asegurarnos de comprar heno y paja segada y empacada en condiciones de baja humedad.
Existen en el mercado secaderos de forraje que garantizan el empacado en condiciones de humedad muy baja.
Suministrar henolaje.
El henolaje es una especie de ensilado para caballos. Si tú mismo elaboras el forraje, puedes cambiar el sistema de conservación y en lugar de elaborar pacas o rollos de heno, puedes “ensilar” la hierba. Asesórate bien para elaborarlo correctamente pues no es el mismo proceso que el ensilado para vacas. Funciona muy bien respecto a este tipo de alergias.
Mojar el heno.
Moja el heno por inmersión en agua durante menos de 30 minutos para que el polvo no flote en el ambiente y tampoco haya pérdida de nutrientes. Ten en cuenta que la alergia asmática se produce por la inhalación de los alérgenos, no por su ingestión. De ahí que también se les llame aeroalérgenos.
Administrar el forraje a nivel de suelo.
Con eso favorecemos que, además de entrar menos polvo, el sistema de drenaje del respiratorio funcione. El sistema mucociliar arrastrará mejor el moco hacia el suelo a favor de gravedad y no en contra.
Usar suelos de caucho en lugar de camas de paja o viruta.
Administrar sustitutivos de los forrajes habituales.
En el mercado existen sustitutivos totales o parciales de forrajes que están perfectamente envasados, de modo que se mantiene su grado de humedad lo suficientemente baja como para impedir el desarrollo de hongos y ácaros.
Administrar reguladores de la inflamación como los ácidos grasos omega antiinflamatorios.
En condiciones normales, cuando un agente dañino penetra en el organismo, el sistema inmune reacciona inmediatamente y lo ataca con diferentes mecanismos. Uno de ellos es enviar células de defensa que fagociten al enemigo. Para que lleguen muchas de estas células puede ocurrir que los capilares se dilaten y aparezca una hinchazón en la zona que ayude a que lleguen más defensas. En esta lucha también mueren células defensivas que, junto con los patógenos y tejido muerto, forman pus.
De modo que, cierta inflamación es positiva, porque permite mayor llegada de defensas y una posterior afluencia de células basurero que recogen los detritus. Podemos decir que esta inflamación es el principio de la cura y la regeneración. Es la “inflamación buena”.
Pero en ocasiones el sistema inmune, que tanto suele ayudar, está hipersensible y reacciona desmesuradamente ante algo que en principio no supondría un gran problema. Es entonces cuando la inflamación es mayor de la necesaria, generando problemas en lugar de evitarlos. Es la “inflamación mala” que ocurre en los animales alérgicos o hipersensibles.
Por eso, los reguladores de la inflamación nos permiten reducir la inflamación mala, sin eliminar la inflamación buena. Y eso sucede en todos los tejidos, ya sean tendones, músculo, piel, o como es el caso de ahora, el tejido del respiratorio.
Los reguladores funcionan muy bien como preventivos y como tratamiento de procesos leves. En procesos avanzados, necesitarás usar medicamentos (prescritos por el veterinario) para controlar las crisis, y una vez controladas, sí podemos usar los reguladores para mantenimiento.
En Pavo, tenemos Pavo Ahiflower®Oil, que con un contenido único de ácidos omega, actúa como regulador de la inflamación.
Sustitutivos de forraje como alternativa de alimento en caso de asma en el caballo
En piensos Pavo tenemos 4 tipo de sustitutivos:
Sustitutos totales del forraje
Pavo Dailyplus: forraje equilibrado para combinar con el pienso.
Sustitutos parciales del forraje, que debes mezclar con tu forraje
Así puedes aprovechar forraje que ya hayas comprado, pero recuerda humedecerlo siempre para que el polvo no flote en el ambiente.
Si llevas el caballo al prado, con la hierba que pasta en libertad y estos sustitutos tendrás cantidad suficiente de fibra sin necesidad de usar heno.
Pavo Speedebeet
De 50 a 400 g/100 kg de peso del caballo, y el resto complementarlo con heno mojado o hierba en el campo.
Pavo FibreNuggets
0,5 – 1kg/100 kg de peso del caballo. El resto complementarlo con hierba en el campo o heno mojado.
Pavo FibreBeet
Es necesario completar la preparación según el estado del caballo con una ración de 100g/100 kg de peso del caballo, según la dosis de materia prima tiene una ración de 1 kg/100 kg de peso y, entonces, es casi un sustituto del forraje.
Los sustitutivos parciales del forraje combinaciones con la estancia del caballo en el campo evitarán que tengas que dar heno con polvo, esporas y ácaros, que le causan el asma.
Es muy importante que el caballo permanezca el mayor tiempo posible en el campo, excepto el asma que hay en Polonia o algún tipo de hierba de ese campo. Y el invierno puedes guardarlo a la noche en el box y darle su ración de fibra. en forma de estos sustitutos, y en verano también puedes complementar la hierba que ya escasea.
Tenerlo en el campo respira mejora la calidad del aire que respira, tanto por mejorar la ventilación al no tenerlo entre cuatro paredes como por no estar encima de la cama que siempre tiene algo de polvo.
Puedes escuchar "El asma del caballo" en nuestro pódcast